Matar a Grax y su punk experimental: “Nos une la ansiedad y el entusiasmo, lo que se traduce en música inquieta e intensa”

La potencia del math rock se cruza con la fuerza punk en el mundo de KUAK y SAPO, el dúo de músicos que conforman Matar a Grax, agrupación chilena acaba de estrenar “Zona de Aprendizaje”, EP de siete canciones marcadas por el baile hiperkinético, ritmos progresivos, intervenciones cómicas y una estética animada.

La banda cuenta más detalles del proyecto en músicachilena.cl

“Zona de Aprendizaje” es su primer disco, ¿Cómo fue el proceso de composición y grabación? ¿El nombre del álbum tiene que ver con que ésta haya sido la primera experiencia como proyecto en estudio?

Cuando nos decidimos a grabar el EP, gracias a los fondos obtenidos en el festival independiente de Math Rock, Álgebra Fest, ya teníamos muchas canciones, pero creímos que las seleccionadas representaban nuestra propuesta de manera sintética. Grabamos todo en dos jornadas de 4 horas cada una, primero guitarra y batería simultáneamente y la segunda jornada agregamos voces, bajo y segunda guitarras, todo en Insecta Records.

El nombre del álbum se origina en la letra de “¡Zoo-Sim-Oh!”, inspirada en Don Zócimo, el portero de nuestro colegio desde 1984. Él falleció el 2021, y nombramos la canción en su recuerdo. “Abre las puertas a nuestra zona de aprendizaje”. Esta frase resonó con que creemos que se abren las puertas a un espacio, un lugar tanto físico como imaginario donde aprenderemos y creceremos como personas, siendo los primeros pasos de Matar a Grax dentro del medio nacional y aunque llevamos 6 años existiendo con 3 años en los escenarios, si no estamos en los medios, es como si no existiéramos. Algo como «Si un árbol cae en un bosque y nadie está cerca para oírlo, ¿hace algún sonido?»

Su música es muy particular, ¿Cómo la definirían? ¿Cuáles son sus principales referentes y/o inspiraciones?

Con Joaquín nos une la ansiedad y entusiasmo, lo que musicalmente se traduce en música muy intensa e inquieta. Tenemos un lenguaje muy percusivo y progresivo, el cual no nos sorprende que se aloje en el math rock. Lo que hacemos en este disco lo llamamos Math Punk Experimental, ya que creemos que hacemos Math Rock pero con alma punk. La fuerza cruda y las ganas de tocar son más importantes que los arreglos, pero la música monótona nos aburre. Lo experimental, es porque nuestra manera de componer cada canción es distinta, vamos jugando e improvisando, probando distintos géneros y elementos sin tener una receta predefinida. Muchas veces terminamos una canción cagados de la risa, ya que nos sorprende que funcionen ciertas cosas que parecen estúpidas. Nuestra música es un chiste, pero un chiste que nos tomamos muy enserio.

Nuestros principales referentes desde el math-rock son The Fall of Troy, Totorro, Hella y Tera Melos. Otros vienen desde Foo Fighters, Tool, Limp Bizkit, Deftones, The Locust, Meshuggah. Referentes no musicales, Podemos nombrar a Smiling Friends, Eric André Show, The Regular Show, Hora de Aventura y, principalmente, 31 MINUTOS.

¿Cómo se conocieron? ¿Cuándo empezaron a hacer música juntos y cuando nació Matar a Grax?

Con Joaquín nos conocimos alrededor de los 7 – 8 años en un taller de juguetería de nuestro colegio, dónde armábamos autitos y monstruos con tapas de bebida, cajas de jugo y reciclados varios. Nos sentábamos juntos pero fuera del taller no nos veíamos. A finales de cuarto medio (2014), volvimos a hablar por una competencia de bandas y comenzamos a hablar de música, cachando que nos gustaban muchas de las mismas bandas. Volvimos a no saber mucho del otro, pero ya en período universitario (2018) nos encontramos en un patio de comidas, Joaquín estaba cubriendo un turno en Starbucks y yo -Raimundo- almorzaba con mi abuela. Me contó que estaba partiendo una banda de math rock junto a un amigo (Cristóbal Fernández). Inmediatamente me sumé al proyecto y, pocos días después, nos reunimos en mi casa con Fernando Velasco como bajista. En ese entonces nos llamábamos Grax, odiábamos el nombre, por lo que nos pusimos No Somos Grax. Ensayamos mucho, pero creativamente no fluimos. Con la salida de Cris, nos tomamos un receso y cuando volvimos a retomar la banda como trío, nos cambiamos el nombre a Matar a Grax. Con Joaquín tuvimos una explosión creativa, componiendo cada ensayo canciones nuevas y proponiendo ideas. El día del debut en vivo, en Feria Creadores, improvisamos nuestro vestuario y juntamos todos los peluches que pudimos. Ese día descubrimos a Kuak, Sapo y Mingo y desde ese momento nuestros cuerpos se unieron con estos personajes que todavía seguimos descubriendo.

¿Qué piensan de la escena rockera chilena? ¿Creen que Matar a Grax entra ahí?

Creemos que la escena rock está dominada por hard rock clásico que vive de la nostalgia y bandas tributo, lo que es lógico pero a la vez frustrante para quienes nos esforzamos por hacer música original y proponer algo nuevo. También está la escena indie, la cual está super fuerte entre nuestra generación y lxs cabrxs más jóvenes. Es bonito ver que la escena juvenil tenga su propio lenguaje y pueda desarrollar una comunidad fuerte alrededor de la música, pero creemos que en el caso del Indie, a veces termina siendo una caricatura de sí mismo y de lo denominado “ñuñoino” y cae en una monotonía desabrida. De todas maneras destacamos bandas increíbles del indie como Estoy Bien, Confío en tus Amigos y Así Me Dicen. La escena emergente a la cual creemos pertenecer va desde el math rock al post-rock y post-hardcore, con bandas como Linda, Autodefensa, Girafa, Dalia Gardenia, El Triángulo de Penrose, Hesse Kassel, Lepidóptera, entre otras.

¿A qué le canta Matar a Grax?

Le cantamos a lo que necesite ser cantado en el momento que nos ponemos a escribir. No lo pensamos mucho, sino que tratamos de manifestar sin reprimir aquello que nos nace del corazón.

¿Qué viene para Matar a Grax este año?

Ufff, si nos ganamos el loto, mucho (risas). Pero por ahora, tocar en vivo y ahorrar lo que podamos para seguir grabando canciones para nuestro siguiente disco. Un videoclip no estaría mal.